De nuevo me sumerjo aquí como cuando busco ese baño mañanero en el mar intentando limpiar todo aquello que me hace daño.
Necesito bucear. No oir nada salvo el silencio profundo del fondo del mar. Abrir los ojos y ver el sol desde abajo, atravesando la masa de agua y llegando hasta mí. Dar una o varias volteretas y observar lo mismo desde todos los ángulos posibles.
Necesito pensar que nada puede molestarme si no quiero.
Quiero las cosas limpias, claras, llanas, sin vueltas ni escondrijos, sin dobles caras.
De nuevo son ellos lo único que me motiva. De nuevo a hacer tostadas y a inventar un día que nos dé momentos para reír.
Necesito pensar que nada puede molestarme si no quiero.
Quiero las cosas limpias, claras, llanas, sin vueltas ni escondrijos, sin dobles caras.
De nuevo son ellos lo único que me motiva. De nuevo a hacer tostadas y a inventar un día que nos dé momentos para reír.
Necesitas bucear tan a menudo que alejas de ti toda posibilidad de amar y te encierras cada vez más pero claro...como tú eres así...
ResponderEliminarTu tarea es tan dura sola, que es muy difícil que alguien que no la haya vivido (yo no, solo tengo uno), la entienda. Para mí era que no te queda casi ni un minuto para ti, y encima como eres un sol sabes que tienes que darles alegría a tus hijos aunque tú no la tengas, y, eso es agotador, demoledor, inevitable, deprimente, un reto, una obligación, una responsabilidad, una locura: tienen una madre fantástica y son y somos muy afortunados, sólo por el lugar y la época en la que hemos nacido, si no te hubieras separado habría días grises, azules, marrones, rojos, rosas, soleados, incluso, negros. Pero como te has separado todo tiene que ser rosa para que los niños no sufran. Y encima, como tú "has elegido" separarte tienes que estar bien. ¡Bastante pata has metido ya, guapa!. Así que no bucees tanto y jódete sin dar por culo, y digo yo: ¿será que todos aguantan su vela sin rechistar? Y tienes muchas ganas de llorar, hasta cuando, afortunada e inevitablemente, tus hijos te hacen feliz.
ResponderEliminaraMARes hacer tostadas inventando un día con momentos para reír, y el hacer gozar intuitivamente el sentirse amado, que ya se queda tatuado en la piel, enseñando cómo demostrar amor: haciendo tostadas inventando un día con momentos para reír.
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